Persona de contacto: En Washington: Christopher Neal, (202) 473-2049 [email protected] MAPUTO, 2 de mayo de 2008. El Banco Mundial conmemoró el Día Internacional de la Libertad de Prensa dando a conocer un estudio en el que se describen a grandes rasgos las condiciones en las que las emisiones de radio, televisión y a través de Internet pueden desempeñar un papel fundamental para exigir a los gobiernos que rindan cuentas y para dar voz a los pobres del mundo. “Una enorme cantidad de personas, inclusive aquellas que no saben leer, tienen acceso a los medios de radiodifusión”, señaló Kreszentia Duer, del Instituto del Banco Mundial (WBI, por su sigla en inglés), quien presentó el estudio titulado Broadcasting, Voice and Accountability (Radiodifusión, voz y rendición de cuentas), en una conferencia sobre la libertad de expresión que se celebró en Maputo con el auspicio de la UNESCO. “En los países con fuerte tradición oral, las emisoras comunitarias permiten difundir información y plantear cuestiones ante una extensa audiencia, y exigir a los funcionarios públicos que rindan cuentas. Esta posibilidad hace que la radiodifusión sea una poderosa herramienta para mejorar la gestión de gobierno y promover el desarrollo”. El estudio de 400 páginas, subtitulado A Public Interest Approach to Policy, Law and Regulation (Una concepción de la política, la legislación y la regulación desde el punto de vista del interés público), es el resultado de las investigaciones realizadas durante cinco años por seis expertos en medios de comunicación: Kreszentia Duer; Steve Buckley, presidente de la Asociación Mundial de Emisoras Comunitarias; Toby Mendel, ARTICLE 19, Campaña mundial por la libertad de expresión; Seán Ó Siochrú, fundador de la Campaña por los derechos de la comunicación en la sociedad de la información; Monroe E. Price, de la Annenberg School for Communication de la Universidad de Pennsylvania y Marc Raboy, de la Universidad McGill de Canadá. El estudio contiene un examen de las prácticas y regulaciones en materia de radiodifusión en todo el mundo y señala aquellas que generan las “condiciones propicias” para que los medios de radiodifusión sean libres, independientes y pluralistas. Según el informe, estas características son fundamentales para que la radiodifusión cumpla eficazmente la función de dar voz al pueblo y asegurar la rendición de cuentas por parte del gobierno. Sobre la base de sus investigaciones, los autores proponen normas en materia de libertad de expresión, acceso a la información, uso y abuso de la legislación sobre difamación, reglas sobre contenidos y límites a la libertad de expresión, así como sobre la regulación del periodismo. El estudio también contiene orientaciones sobre prácticas óptimas destinadas a autoridades reguladoras de los medios de radiodifusión, así como una descripción de la función que cumplen, respectivamente, las emisoras públicas, comunitarias sin fines de lucro, y comerciales del sector privado. Los autores sostienen que todos estos tipos de emisoras deben estar presentes en el ámbito de los medios de comunicación para que éste sea saludable. Steve Buckley, coautor del estudio, señala que el avance de la democracia en los países en desarrollo abre el camino para crear medios de radiodifusión que sirven al interés público. “Los países que ponen en marcha un proceso de apertura de la economía, democratización y descentralización de la prestación de servicios públicos necesitan orientación para lograr que sus ciudadanos participen en las decisiones que los atañen. Los medios de radiodifusión, facultados por las reglamentaciones y las condiciones apropiadas, pueden dar poder de decisión a grupos de habitantes a través de la participación de las bases”, afirmó Buckley. En el libro se mencionan los países que han desarrollado sistemas para incrementar la calidad y la diversidad de los contenidos de los medios de comunicación, al tiempo que respetaban plenamente la libertad de expresión, y se describen las reglamentaciones que pueden aplicar los gobiernos para ampliar el acceso a los medios de radiodifusión. Para promover la radiodifusión comunitaria, por ejemplo, pueden concertarse acuerdos especiales para la concesión de licencias que garanticen el acceso justo y equitativo a frecuencias de radio y apoyo financiero. “En este libro se pone el acento en mecanismos dinámicos que son útiles para crear, mantener y regular los sistemas de radiodifusión en todo el mundo”, señaló Ruth Teer-Tomaselli, cátedra UNESCO de comunicación para la Universidad de KwaZulu-Natal. “Se basa en sólidos conocimientos y proporciona asesoramiento práctico tanto para autoridades normativas y especialistas en comunicación como para las emisoras”. ### Para adquirir un ejemplar: |